¿Cómo identifico las mesas?
Una de las cosas más divertidas que hay en la organización de un boda, es la decoración de las mesas. No nos referimos a las flores o a la colocación de los invitados sino a los detallitos, es decir, el mesero, los números que indican cuál es cada mesa.
Hay muchísimos modelos desde botellas de vidrio con el número, pasando por fotos de lugares importantes para los novios, títulos de películas, portaretratos, velas…
Con esto de la crisis están proliferando modelos realizados a mano, con mucho mimo e ilusión por la novia, sus hermanas, amigas e incluso el novio y su familia. Ésta es una manera muyyyy divertida de hacer partícipes a tus seres más queridos en la organización de la boda, además, claro está de ahorrarte unos eurillos y echarte unas buenas risas.
¡Imagináos! Tus invitados llegan al lugar elegido para el banquete y lo primero que hacen es acercarse al mesero para conocer en qué mesa los habéis colocado. El primero de ellos ve que está sentado en la mesa Casablanca (por la peli de Humpbrey Bogart e Ingrid Bergman) o en la mesa Melocotón, y que cuando llega a su sitio se encuentra un fotograma de la película o la mesa decorada con melocotones. Queda muy bien ¿no os parece?.
También podéis identificar la mesa con fotos de la vida de novios. Viajes, excursiones o momentos que hayan significado algo importante en la vida de la pareja. Así, conseguiréis que los comensales hablen y comenten la foto mientras esperan por la comida. Incluso, en algunas mesas, en la de los hermanos o los amigos más íntimos e importantes podéis elegir fotografías ‘comprometedores’ que hagan afloran las risas, los chistes y los buenos recuerdos.
Lo importante es personalizarlos. Así, se le da un toque de alegría a la decoración que además permite reflejar la personalidad de los novios, además de ser un toque de distinción que le dará originalidad a la boda.
Hay millones de ideas, unas más caras, otras más baratas, más divertidas, tiernas…en fin todo depende de los gustos y preferencias de los novios. Pero lo importante es que cuando vuestros invitados recuerden el Gran Día, recuerden lo divertido de fue desde que se sentaron a la mesa.