Amor entre muros medievales (Alberto & Ana)
Alberto y Ana juntaron sus vidas el pasado catorce de julio rodeados de sus familiares y sus amigos más íntimos y queridos. El lugar elegido para darse el ‘sí quiero’ fue la Iglesia de los Misioneros del Sagrado Corazón. Ambos se dirigieron al altar acompañados de dos pequeñas damitas de honor que hicieron las delicias de los asistentes.
Ana, maravillosa, eligió un vestido en palabra de honor con detalles en tablas a la altura del pecho y la cintura que hacía entrever su estilizada figura. Como complementos, Ana optó por la sencillez. Apenas enjoyada, se decantó por una preciosa pulsera de brillantes y unos elegantes pendientes en forma de lágrimas. El maquillaje, apenas visible, resaltaban sus enormes ojos verdes, que seguro, son la debilidad de Alberto. Por su parte, el orgulloso novio, vistió un traje de chaqueta azul marengo al que otorgó un toque de color con la corbata en color fucsia.
La pareja de recién casados ofreció a sus invitados un suculento menú elaborado por los magníficos y prestigiosos chef del Restaurante Can Cortada, un antiguo castillo del siglo XI, en Barcelona, reformado en 1994 por la familia Soler i Ribatallada, en cuyo interior las paredes de piedra impregnaron al enlace de una majestuosidad de la Edad Media.
Esta masía Solariega, forma parte del Patrimonio Artístico de la ciudad Condal y en el interior alberga una antigua torre de defensa para prevenir posibles ataques feudales con más de mil años de antigüedad.Vamos, todo romanticismo histórico. Además cuenta con ocho salones privados, comedor de verano y jardín, donde poder dar románticos paseos.
