Judit y Dalmau, entre el bosque y el mar
Rodeados de naturaleza y con el sol del Mediterráneo bañando cada rincón, Judit y Dalmau se dieron el sí quiero el pasado 18 de mayo. El enlace se celebró en el Ayuntamiento de Vilassar de Mar, en una ceremonia civil íntima a la que fueron invitadas unas cincuenta personas.
Judit y Dalmau eligieron celebrar el banquete en Turó del Sol, en Sant Vicenç de Montalt, también en el Maresme, donde el bosque y el mar se dan la mano creando un entorno muy especial, tanto como lo fue ese día para los novios y sus invitados.
Este restaurante es un lugar idílico donde la naturaleza rodeada el entorno. Sus grandes jardines, adornados con fuentes, palmeras y multitud de flores muticolores le dan al evento un aire mágico que te traslada a otros lugares. Los pavos reales y sus vistas al mar, hacen de Turó del Sol un lugar inigualable.
De largo, con un vestido entallado hasta la cintura, sencillo y elegante, con vuelo en la falda, Judit lucía la mejor de las sonrisas y el brillo en los ojos que debe acompañar a toda novia. Dalmau eligió un elegante traje negro, con la chaqueta con finas rayas blancas, muy favorecedor.
Al ser una boda de día y con un tiempo fantástico, el aperitivo se celebró en los jardines de esta finca de 50.000 metros cuadrados, donde pudimos disfrutar de exquisiteces que nos abrieron el hambre para lo que vendría después. En el interior, en un gran salón, pudimos degustar un menú espléndido de sabores tradicionales que agradó a todo el que tuvo la suerte de probarlo.
Uno de los momentos más emotivos, de los muchos que hubo, lo protagonizó la hermana de Dalmau, quien quiso obsequiar a los novios con un precioso detalle: una proyección de un videomontaje con fotografías de la pareja desde pequeños hasta la actualidad, lo que provocó más de una lagrimita.
Pero las emociones a flor de piel dieron paso a la fiesta en su máxima expresión, con baile y risas que se alargaron hasta que los invitados tuvieron aguante.
Nuestro enfoque en cuanto a las fotos fue combinar el blanco y negro, que aporta sobriedad y estilo, con los retoques algo retro para el color, con poca saturación y mucha luz.
